ADIOS CRIMINAL

Sin duda estamos frente a un momento histórico. No al fin de una època (como planteo ricardo lagos), sino a un momento esperado por muchos.
Y es que la muerte del dictador es sin duda un momento de júbilo para muchos de nosotros. Marca un simbolismo en cuanto a la deaparición fìsica de quien tanto daño causo a nuestro país por mas de 30 años.
Sin duda que -a pesa de su edad y sus enfermedades- fue algo sorpresiva su muerte. Se ponía en duda la veracidad del infarto al miocardio y el edema pulmonar que lo llevo al hospital militar el domingo anterior a su deseso. Y en verdad, muchos pensamos que el "tongo" quedaba de manifiesto en la espectacular recuperacion que presento durante la semana, el mejor regalo para su esposa Lucìa que el 10 de diciemnbre cumplió 84 años, decia su familia.
Pero el tiempo al fin le paso la cuenta. A los 91 años, desaparecía la figura fìsica del dictador de nustro país, el personaje mas controvertido y cruel de la historia reciente de nuestro país. Al conocerce la noticia el festejo por un lado y el llanto por otro fue inminente.
Saber que sentia cada persona que celebraba es imposible, sólo se sabe que es una extraña sensación. Una mezcla de alegría e importencia. El dictador cayó, pero se fue impune y llevándose a al tumba el secreto del paradero de cientos de compañeros que continuán desaparecidos.
Lo cierto sin embargo, es que el festejo fue de la puta madre. Siempre pensaba en como sería ese momento. Lo imaginaba y esperaba para disfrutarlo. Y aunque muchas personas plantean que la muerte no se le desea a nadie y que como es posible que se festeje la muerte de una persona, era un sentimiento que no podìamos dejar de expresar los miles que el domingo nso tomamos las alamedas para cantar, bailar, gritar, saltar y "despedir" al tirano.
Los festejos han continuado, hoy en la plaza de la constitucion, a la misma hora que la misa final y los honores al dictador eran ralizados en la escuela militar ante varios cientos (quizas miles) de seguidores del asesino (jamas pense que eran tantos), en el monumento de Salvador Allende se veìan cientos de banderas, bajo las cuales, una parte importante de la población vitoreba el ADIOS CARNAVAL, ADIOS CRIMINAL cantado por sol y lluvia que animaba este acto.
Lo úniko que nos queda ahora, es continuar con la lucha, al desaparecer el dictador, no podemos permitir que lo hagan las causas e investigacion que se realzaban en su contra y en contra de los culpables que siguen con vida. Además del modelo económico y político que lamentablemente nos dejo de herencia.
Pinochet se fue sin los honores correspondientes a un jefe de estado, por que no ocupó ese cargo de manera legítima. La derecha y sectores mas duros del pinochetismo plantearon que debío haber tenido esos honores. El gobierno no lo autorizó. En el senado se hizo un minuto de silencio por el dictador. Su nieto en la ceremonia de lso honores dijo un discurso que le costara una sanción. Los pinochetistas lloraban mientras miles celbrábamos. Muchas cosas para una agitada semana, que tengo el placer de haber vivido y disfrutado, para poder contar a los que quieran escuchar.